Equilibrio. Flexibilidad. Control.
El cuerpo en movimiento. Adrenalina.
La vista fija en un punto sin movimiento, delante nuestro. Ajeno a todo.
Sin más, el entorno desaparece. Pasamos a ser nosotros, y únicamente nosotros.
No hay sonidos, no hay palabras, nuestra respiración como centro y el latido acelerado de nuestro corazón.
La sangre fluye, las emociones se ordenan. Claridad de mente.
Estirarse... hasta tocar el horizonte...
Paz interior.
El cuerpo en movimiento. Adrenalina.
La vista fija en un punto sin movimiento, delante nuestro. Ajeno a todo.
Sin más, el entorno desaparece. Pasamos a ser nosotros, y únicamente nosotros.
No hay sonidos, no hay palabras, nuestra respiración como centro y el latido acelerado de nuestro corazón.
La sangre fluye, las emociones se ordenan. Claridad de mente.
Estirarse... hasta tocar el horizonte...
Paz interior.
3 comentarios:
Momento mágico ese en que conseguimos esa paz interior que tanto anhelamos!
Besitos,
Equilibrio, flexibilidad y control, una buena combinación para encontrar nuestra paz interior.
Bonita entrada Paola.
¡Ah! me alegra que tengamos en común el amor por la pintura.
Un besito guapa.
INTERESANTE EL BLOG...SEGURO VUELVO
SALUDOS
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