19 de agosto de 2010

Sonrisa de Sol


Una mañana de Sol impresionante, ni frío ni viento... Simulando que el invierno se está terminando, aunque todos sabemos que dura un poco más. Somos hijos del Sol, si, en mi hogar al menos, vemos asomar un rayito y queremos salir a saltar por allí, corriendo...

Así como los grandes ventanales, vidrio mucho vidrio, y la ausencia de persianas (se edifica así en esta zona ultimamente) dejan pasar el crudo frío del invierno sin darnos tregua, finalmente al dar paso a los rayos imponentes del astro sol la casa entera se ilumina y despierta.

Pero este día, con los niños aún laríngeo-faríngeo-resfriados, siguiendo mis pasos, epidemia general, no será posible ninguna travesía, nos conformaremos con asomar la nariz al pequeño jardin y acomodar un poco césped y plantitas, a decir verdad las que aún quedan vivas.

Por otra parte, qué vueltas da esta vida, y nosotros inmersos en ella... Qué tamañas transformaciones, qué cambios deseados o no, a conciencia plena o sin ella, somos capaces de prodigarnos... Una inmensa rueda girando.

Ultimamente, sintiéndome más que positiva, entusiasmada, ida... Llega el momento de ver más allá, con colores más intensos, con una música más dulce, con un canto más intenso. Dando saltitos como una niña. Sonriendo a tiempo (casi) completo. Enhorabuena! Como solía ser.

Siendo que para mi, la sonrisa natural es como ese rayo de sol del que asoma por mi ventana. La que todo lo puede. La imbatible. Una sonrisa plena, interna, que florece porque sí, sin razón aparente, es decir sin una razón exclusiva, sin un objeto-persona-acontecimiento específico. De momentos por algo en particular, pero no siempre. Por la vida misma!! Por tener lo que se tiene. En mi mente, como les digo a mis hijos cuando pucherean en vano, como la mejor sonrisa de una gran fotografía.

Seguramente a causa de todo, a la vez de nada, de muchas cosas que vemos acomodarse, muy a pesar de otras que no logran cerrarnos por completo, acontecimientos que suelen ser buenos, muy buenos, excelentes o incómodos y fuera de foco. El cuadro de la vida pintado con todos los colores. Pudiendo seleccionar los que más me conforman.

Somos los mismos que fuimos, en esencia, transformando lentes, ajustando la percepción. Un mirar más acertado. Y aquello que nos sigue afectando, a pesar de los intentos, buscamos dejarlo a un lado, no darle cabida. Ay! de la energía perdida... Más que imposición, una elección, va decantando por su propio peso, va situándose en otro escalón. La métrica se modifica, la escala de valores también, "todo pasa" solían decir, una y mil veces, y es cierto. Luego de que todo pasa, qué nos queda? La traza de un nuevo camino que se gestó hace tiempo.


"- Vos... siempre estás sonriendo? " (si, no, estaba... para qué explicar tanto...) Sunshine para el alma y una pregunta que definitivamente determina más sonrisas!

4 comentarios:

Soñadora dijo...

Me alegra mucho encontrarte sonriente y que rico es ver , sentir, y deleitarse con el Sol!
Besitos,

luisa maria cordoba dijo...

Hola Paola, el sol nos da vida, me alegra que sonrias, una entrada muy luminosa.
Un beso guapa.

Sergio dijo...

Hola,

una sonrisa puede cambiar hasta el color me mis dias...

Que linda la foto!

Te dejo saludos argentinos,

Sergio.

Poli dijo...

Soñadora, gracias, cuando sale el Sol x fuera, y además lo sentimos dentro, es bello! Besos.

Luisa: una sonrisa vale mas que cualquier palabra, o que muchas palabras que se suelen decir. Besos.

Sergio: es verdad, lo cambia todo, sea nuestra sonrisa o la del otro. La foto es de google, hermosa. Saludos (tambien argentinos!)